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[2131] • BENEDICTO XVI (2005- • URGENCIA DE PROCLAMAR LA VERDAD INTEGRAL SOBRE EL MATRIMONIO Y LA FAMILIA
Discurso En ces jours, a los miembros de la Conferencia Episcopal de Chad en visita ad limina, Castelgandolfo, 23 septiembre 2006
2006 09 23 0004
Uno de los desafÃos que debéis afrontar es la urgencia de proclamar la verdad integral sobre el matrimonio y la familia. En efecto, es fundamental mostrar que la institución del matrimonio contribuye al verdadero desarrollo de las personas y de la sociedad, y permite garantizar la dignidad, la igualdad y la verdadera libertad del hombre y de la mujer, asà como el crecimiento humano y espiritual de los niños. âCreados el uno y el otro a imagen de Dios, el hombre y la mujer, aunque diferentes, son esencialmente iguales desde el punto de vista de su humanidadâ (Ecclesia in Africa, 82).
Una seria formación de los jóvenes favorecerá una renovación de la pastoral familiar y contribuirá a superar las dificultades de orden social, cultural o económico que, para numerosos fieles, son obstáculos al matrimonio cristiano. Ojalá que los jóvenes de vuestro paÃs, conservando los valores esenciales de la familia africana, acojan en su vida la belleza y la grandeza del matrimonio cristiano que, en su unicidad, supone un amor indisoluble y fiel de los esposos.
[Insegnamenti BXVI, II/2 (2006), 340]
2006 09 23 0004
Parmi les défis pastoraux à relever, se trouve lâurgence de proclamer la vérité intégrale sur le mariage et sur la famille. Il est en effet primordial de montrer que lâinstitution du mariage contribue au véritable développement des personnes et de la société, et permet dâassurer la dignité, lâégalité et la véritable liberté de lâhomme et de la femme, ainsi que la croissance humaine et spirituelle des enfants. âCréés lâun et lâautre à la ressemblance de Dieu, lâhomme et la femme, quoique différents, sont essentiellement égaux du point de vue de lâhumanitéâ (Ecclesia in Africa, n. 82).
Une sérieuse formation des jeunes favorisera un renouveau de la pastorale familiale et contribuera à lever les difficultés dâordre social, culturel ou économique qui, pour de nombreux fidèles, sont des obstacles au mariage chrétien. Tout en préservant les valeurs essentielles de la famille africaine, puissent les jeunes de votre pays accueillir dans leur vie la beauté et la grandeur du mariage chrétien qui, dans son unicité, suppose un amour indissoluble et fidèle des époux.